Para escribir un poema, Hay que tener una pluma
Alegrías de la mañana, Nostalgias de anochecer
Dejar que las aguas corran, por donde deben correr
Que el tiempo siga su marcha, sin poderlo detener.
Hoy que todavía recuerdo, los sucesos del ayer
Quiero volver en la historia, pa´poder reconocer
Como nació mi colegio, pues lo deben entender
Al celebrar sus cumpleaños, con tanta dicha y placer.
Dos hombres ya fallecidos, cumplidores del deber
Ambos que fueron alcaldes y que pensaron muy bien
Fundaron este Colegio, como lo manda la ley
Pa´educar a los llaneros y a un pueblo fortalecer
Ellos fueron Vaca Hernández, Dr Baquero Soler
Que en paz descanse sus almas, que Dios los tenga muy bien
Que su obra dio buenos frutos, como lo podemos ver.
Voy a cambiarles la rima, porque la
pluma me llama
Para relatar la historia, como me sale del alma:
En el año 89, la Institución fue creada
Decreto 79, el concejo lo firmaba
Dr Baquero Soler, como alcalde respaldaba
Luego inicia sus labores, como todos esperaban
Para un primero de marzo del año 91, ya como alcalde Omar Vaca
Y el acuerdo 05, del mismo año que pasaba
Lo llama GUILLERMO NIÑO, nombre que le da la fama.
Con 18 años cumplidos, trabaja tarde y mañana
También se creó el nocturno, porque se necesitaba
Y otro programa especial, para el fin de semana.
En el año 96, llega por fin a su casa,
ubicada en el estero, en medio de flora y fauna
nombran su planta docente, solo gente licenciada
con Fabio como rector, quede muy bien conformada.
Aquí se apoya el deporte, estamos en la jugada
El folclor otra bandera que se vate desplegada
Hay varia modalidades, gente que aquí se prepara
Está el programa académico, recreación e informática
Aquí se baila el joropo, con toda la muchachada
Y este primero de octubre, el colegio se engalana
En su primer festival. Música, joropo y danza
Y a parrandiar con cariño, así como
Dios lo manda
Que viva el Guillermo Niño, símbolo de mi tierra llana.
Nuestro colegio funciona, de una forma organizada
No es necesario el rector, pa´que las cosas se hagan
Por la lealtad y compromiso, que a toditos nos abraza
Muy cerca a este cumpleaños, todas las cosas marchaban
Se armaron las comisiones con gentes de ambas jornadas
Para arreglar el colegio, quitarle las telarañas
Hay un comité central, con profes muy entusiastas
Efraín, Evelia, Rosa y Ángel que los acompaña
Los he visto muy juiciosos, limpiando y sembrando matas.
En el polideportivos, este grupo que trabaja
Abrieron los camerinos, sacaron palos y latas
Vi salir a Oscar Acosta, montado sobre una rata
Y si Aguirre no se quita, hasta le parte una pata.
En la entrada del Colegio, esa pared fue pintada
Pa´que un hermoso mural, Jucamar lo dibujará.
Patricia allá en la maloka, el piso lo levantaba
Y le pegaba baldosas, como ingeniera graduada
Al frente de biblioteca, Abelardo trabajaba
Haciendo todas las cosas, que Evelia les ordenaba
Y me dice Mogollón, con la voz entrecortada
Porque no descansa un rato, se toma una limonada
Le dije ahorita no puedo, porque Evelia me regaña
Por la tarima central, Ana Cecilia pasaba
Con un manojo de isoras, la plata recolectada.
La profesora Teresa, las carteleras armaba
Publicitando el evento, porque se
necesitaba
En el centro del colegio, un pollo se revolcaba
Pintando y trazando líneas, delimitando las canchas
Jhon Edilberto juicioso de la sombra lo miraba
Con deseos de trabajar, pero se aguantó las ganas.
En la sala de profesores, Miriam Cruz, Miriam Guevara
Echaron lija y pintura y se pintaron la cara.
Recostadas a la gruta, Clemencia y Sandra rezaban
Querían pasear a la virgen, al hombro o a sus espaldas
Y quitarse algunas penas, que en el alma les pesaba.
También Cecilia Mancera, comprometida pasaba
Con rumbo a tesorería, que era su zona marcada
Pero se perdió de camino, porque allí no se hizo nada.
Yo quiero en forma especial, felicitar a primaria
Con Aléida a la cabeza, viven bien organizadas
Visten de colores raros, durante toda la semana
Si pelearan contra Chávez, seguro que ellas le ganan
Por otra parte Jacobo, con sus pollitas marchaba
Salieron de primavera, Alberto en la retaguardia
Traían un gallo tapao, cosa que nadie esperaba
Querían dejar esta vez, toda su huella marcada
Porque donde pica mi gallo, la herida nunca se sana
